Trabajo de mañanas y toca madrugar, cómo odio el despertador! Luego estoy todo el día bostezando y deseando que llegue la tarde para dormir, soy la pescadilla que se muerde la cola, o la marmota que se muerde la cola. Mis neuronas, perezosas y flojitas como siempre, no pueden pensar nada con lucidez, y por eso escriben cosas como ésta, sin sentido ni olor.
Sólo quiero dormir un rato más por la mañana, acaso pido tanto????